miércoles, 3 de agosto de 2011

Conoce el Marxismo-Leninismo.3 El Capitalismo

El capitalismo es uno de los modos de producción basados en la propiedad privada sobre los medios de producción. Como es el que nos ha tocado vivir -combatir- vamos a analizarlo de manera un poco más profunda.
El capitalismo es un modo de producción que se instaura en Europa a partir de 1789- con la Revolución Francesa- y, progresivamente se expande por todo el mundo. Como sabemos, el cambio de sistema -del modelo feudal al capitalismo- se produjo de manera radical y revolucionaria. La burguesía, que era la clase social objetivamente interesada en la desaparición del caduco modo de producción feudal -porque impedía su enriquecimiento mediante los gremios, la estructura de posesión de materias primas por feudos..-, se puso a la cabeza de las masas para conducirlas hacia el capitalismo.
La esencia del capitalismo consiste en que los miembros de una clase - la de los capitalistas- es propietaria de las fábricas, de las máquinas, de las herramientas de trabajo y de los materiales y las materias primas, mientras que los miembros de otra clase - la del proletariado-, que no tienen nada de esto, poseen tan solo su propia fuerza de trabajo. Todo el mundo sabe que, aunque traten de vendernos las mentiras burguesas de que aquí todo el mundo es libre, y hace lo que quiere - no como en las dictaduras comunistas (¿?)-, realmente, si no trabajas te mueres de hambre. Y además, hay que trabajar en las condiciones que marca el patrón. De manera que, de libertad, nada. Los obreros están esclavizados y obligados a vender todos los días su fuerza de trabajo para poder malvivir.
Claro que según la burguesía, no hay nada malo en trabajar: al fin y al cabo ellos también trabajan -hay que tener la cara muy dura para llamar TRABAJO a embolsarse todos los años los millones de beneficios de sus empresas mientras se pasan la vida en sus yates o tomando copas en Marbella-. De todas formas, según ellos, en el proceso de producción, los obreros reciben un salario justo por su trabajo, y los capitalistas ganan dinero porque aportan el capital. Veamos esto detenidamente, porque es aquí donde reside la esencia de la explotación capitalista.
Vamos a ir despacio. Más o menos todos sabemos como se producen las cosas: los materiales van pasando de mano en mano, de trabajador en trabajador, hasta que sale un producto final. Por ejemplo, un trabajador tala un árbol, otro hace leña, un tercero la transporta durante dos horas hasta la fábrica, donde, en una cadena de producción, doce obreros van metiendo horas hasta que sale una silla. Hasta aquí el capitalista no aparece por ninguna parte. Bueno,sí: es el dueño del bosque, de las sierras, de los camiones, de la fábrica... o sea, es el dueño de todo, y además paga a los obreros. Claro que uno también puede imaginarse una cooperativa de obreros que siendo los dueños de todo eso, llevarán a cabo el mismo trabajo y las sillas seguirán produciéndose. De modo que, ¿ dónde está el famoso trabajo del patrón? Si no hubiera capitalistas la producción seguiría adelante.
Pero, a lo que íbamos. Vemos como, a cada paso, el material va ganando valor: si a alguien se le ocurriera cambiar unos troncos por un coche -por ejemplo- le harían falta bastantes troncos. Pero con sillas es diferente ( CUIDADO: el valor tiene que ver con el precio, pero no es lo mismo, como luego lo veremos ). Además, vemos como, a cada paso, el trabajo se orienta en una dirección concreta: los obreros de la fábrica trabajan para crear sillas y no mesas. Es decir, su trabajo define la utilidad del producto.
Así pues, vemos como las MERCANCÍAS -que por cierto, son los productos destinados al intercambio, o sea, los productos que se hacen para venderlos- tienen un doble valor: por una parte, sirven para algo, es decir, cubren la necesidad concreta. A esto lo llamamos VALOR DE USO. Pero por otra parte, las mercancías se intercambian unas por otras en una determinada proporción -por ejemplo, un coche dos mil sillas, y no cuatrocientas-.A esta capacidad de ser intercambiadas en determinadas proporciones es a lo que denomina VALOR DE CAMBIO  de las mercancías. Todo lo que el ser humano produce para ser intercambiado -es decir, toda la mercancía- tiene un valor de cambio. El valor de cambio es siempre relativo a otra mercancía. Por ejemplo, el valor de cambio de un coche dicho en sillas es, por ejemplo, dos mil.
El PRECIO de una mercancía, por otra parte, no es más que el valor de cambio de una mercancía expresado en dinero. Por ejemplo, si un tornillo vale 10 céntimos, es quiere decir que su valor de cambio, dicho dinero, son 10 céntimos. Y el DINERO no es más que una mercancía que sirve para equipar otras: en vez de andar por la vida cambiando troncos por coches -lo cual, aparte de una tontería, es muy poco práctico y obliga a conocer las equivalencias de unas ochocientas mercancías- es más fácil cambiar troncos por dinero y dinero por coches -o sea, vender y comprar-.
Toda mercancía tiene, por lo tanto, valor de uso y valor de cambio.
Sigamos ¿ De dónde le viene el valor de uso y el valor de cambio a una mercancía?
Respuesta de los capitalistas: de la empresa. Jajaja.Una empresa son un grupo de trabajadores trabajando sobre unos materiales y con unas herramientas y una maquinaria, más un patrón que se saca la pasta de todo el tinglado. Segunda respuesta de los capitalistas: Vale, el valor viene de los trabajadores y de las máquinas. Ya, lo de siempre. Pero es que los trabajadores aún sin herramientas, tan solo con sus manos, puede producir cosas, mientras que un martillo no clava clavos solo.
¿ Cuál es ,pues, la fuente del valor? Pues ya lo hemos dicho: unos obreros trabajan para talar árboles, otros transportan la madera y otros convierten la madera en silla... El trabajo es, efectivamente, la fuente de valor, de riqueza. Y el trabajo, como todos sabemos, se mide en tiempo, en horas. Hasta aquí todos de acuerdo. Ahora bien, si el capitalista paga un salario a los obreros ¿Cómo es que saca esa ganancia, cómo es que está podrido de millones? Respuesta tonta del capitalista:
Es que, al vender, especulo y entonces saco beneficio. Este argumento es perfectamente imbécil: claro está que cada capitalista especula -trata de vender más caro posible-. Pero lo que gana cuando vende sus mercancías, lo pierde cuando cuando compra las de los demás capitalistas: materias primas, herramientas.. o cuando compra bienes para sí mismo. De modo que de ahí malamente puede salir ganancia. Luego solo hay un sitio de donde puede proceder: de los obreros. ¿El sistema? Fácil: basta con pagarles menos del valor de lo que producen.
Ejemplo:
Juan produce, en las 8 horas de trabajo que dura su jornada, botellas de vidrio por un valor equivalente a 120€. Pero el solo cobra un salario de 50€ por sus 8 horas. Aquí hay algo que no encaja: ¿ Qué pasa con los 70€ que faltan? Lo que suponemos: se los queda el capitalista. Visto de otra manera: al ritmo que trabaja Juan, en tan solo 3 horas y media ya ha producido botellas por valor de 50€ -o sea, ya se ha ganado el sueldo-. Pero él tiene que seguir trabajando el resto de su jornada. Luego trabaja el tres horas y media para el y cuatro horas y media para el capitalista. Estas horas -llamadas TIEMPO ADICIONAL DE TRABAJO- las trabaja gratis, sin remuneración ninguna, y todo lo que se produce en ellas -las botellas por valor de los 70€- se las apropia el capitalista, así, por la cara.
Pues bien, aquí es precisamente donde está el quid de la cuestión: bajo el modo de producción capitalista, la clase burguesa explota sistemáticamente a la clase obrera mediante la apropiación gratuita del fruto del trabajo que los obreros realizan durante la parte de la jornada remunerada. Por cierto, el valor producido en ese tiempo adicional es la famosa PLUSVALÍA.
En el proceso de desarrollo histórico del capitalismo, los capitalistas van ampliando y acumulando capital. ¿Cómo? Vendiendo las mercancías y, con la ganancia que obtienen de la plusvalía, comprando más fábricas, más materiales, más máquinas...Porque el CAPITAL es precisamente eso: medios de producción empleados en la explotación social. De hecho según va acumulándose el capital surgen nuevas formas de explotación capitalista: las Sociedades Anónimas, los trust y los holdings -formas empresariales de principios de siglo- y, finalmente, las multinacionales y transnacionales de nuestros días, en la que el capital de los banco se alía estrechamente -mediante el crédito- al capital industrial. También ocurre que, al llegar un momento en que ya no es posible poner en circulación más capital en su propio país -porque está empleada prácticamente toda la mano de obra-, la clase burguesa empieza a exportar capital a otro países: a sus colonias...dónde además, los obreros cobran menos y son menos protestones. Todo esto, claro, a punta de fusil. A este periodo caracterizado por la fusión del capital industrial y financiero y a la exportación de capital es al que se denomina IMPERIALISMO. El imperialismo no es ¨conquistar¨ otros países como nos enseñan en clase. Eso es anexionismo, y es más viejo que la orilla del mar.En el capitalismo, se conquistan países para explotar a los trabajadores de esos países con capital propio. El imperialismo, como lo definió Lenin es la fase superior y última del capitalismo. Es la internacionalización del capital, al principio con tropas imperiales,luego con dictadores títeres del imperialismo y en nuestros días con pretendidas democracias fantasmas: democracias tan demócrata como la de Colombia vendida al imperialismo yanki.





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